La Cámara de la Industria Farmacéutica Boliviana (Cifabol) y autoridades estatales acordaron instalar, desde la próxima semana, mesas técnicas para encarar un desafío que afecta directamente al acceso a la salud: la desactualización de los precios de los medicamentos esenciales en Bolivia.
El gerente de Cifabol, Joci Lino, explicó que los precios referenciales con los que se trabaja en los procesos de contratación pública fueron definidos entre 2022 y 2024, pero se mantendrán como base para el Presupuesto 2026. Esa brecha temporal genera un desfase que, según la industria, no responde “a la realidad” económica actual ni a los costos de producción.
La propuesta de Cifabol apunta a incorporar criterios de indexación y actualización en la metodología de costos, un tema que será analizado en una de las mesas técnicas. El objetivo es evitar que los precios congelados obliguen a recortes en la oferta de medicamentos o incentiven el mercado informal, donde proliferan fármacos de dudosa procedencia.
En la reunión del martes en La Paz, el Gobierno, Cifabol y la Asociación de Importadores de Medicamentos coincidieron en que la Lista Nacional de Medicamentos Esenciales (Liname) debe revisarse porque está “fuera del contexto económico que atraviesa Bolivia”.
Además de la actualización de precios, los actores involucrados definieron dos prioridades adicionales: garantizar el abastecimiento regular y combatir la expansión de medicamentos ilícitos, problema que se agudiza cuando los pacientes no encuentran una respuesta oportuna en el mercado formal.
Para encarar estas tareas, el viceministro de Defensa del Consumidor, Jorge Silva, anunció la creación de dos mesas técnicas. La primera se enfocará en la actualización de precios y la búsqueda de mecanismos que reflejen la realidad económica. La segunda revisará los procedimientos administrativos y de transparencia en las contrataciones públicas.
En este contexto, el debate no solo gira en torno a cifras y metodologías: está en juego la sostenibilidad del sistema de salud y la confianza de la población en el acceso a medicamentos seguros y asequibles.