Más de 2.000 camiones de carga están atrapados en la frontera entre Bolivia y Chile, en medio de una intensa nevada que ha dejado intransitable el paso por Tambo Quemado. Desde hace varios días, los transportistas enfrentan temperaturas bajo cero, sin posibilidad de avanzar ni retornar.
El bloqueo del paso fronterizo, uno de los más estratégicos para el comercio exterior boliviano, ha paralizado el envío de minerales, carne, frutas y cereales hacia los puertos chilenos. Las autoridades de ambos países decidieron cerrar el paso debido al riesgo que representa circular por la zona, cubierta por una densa capa de nieve y hielo.
“Estamos viviendo un verdadero calvario”, dijo Héctor Mercado, presidente de la Cámara Boliviana de Transporte Pesado. “Cada día se suman más camiones, pero no hay condiciones para avanzar ni por Tambo Quemado ni por rutas alternas como Pisiga”.
Desde el sábado, Carabineros de Chile impiden el ingreso por el complejo fronterizo Chungará, acatando un cierre oficial dictado por la Unidad de Pasos Fronterizos. Aunque este lunes se intentó reabrir brevemente el tránsito, el mal tiempo obligó nuevamente a suspender el paso.
El ministro de Obras Públicas, Édgar Montaño, informó que se espera un nuevo informe meteorológico en las próximas horas. Mientras tanto, pidió precaución a los transportistas y anunció que brigadas médicas serán enviadas para asistir a quienes sufren por las bajas temperaturas y la espera prolongada.
El daño económico aún no ha sido calculado, pero empresarios y exportadores advierten que cada día de bloqueo representa pérdidas millonarias y pone en riesgo el abastecimiento de productos en varios destinos. Por ahora, todo depende de que la nieve dé tregua.