Desde junio, todos los camiones que trasladen alimentos o carne en Bolivia deberán contar con un sistema de GPS instalado. Así lo anunció el ministro de Desarrollo Rural y Tierras, Yamil Flores, como parte de un paquete de medidas contra el contrabando y para garantizar el abastecimiento interno.
La disposición busca asegurar que los productos lleguen al destino final sin desvíos hacia mercados ilegales, especialmente en zonas fronterizas. "El GPS será un requisito indispensable para circular. Quien no lo instale, no podrá transportar alimentos ni carne", advirtió Flores.
Además del monitoreo satelital, el Gobierno implementará guías de movimiento digitales para evitar la falsificación de documentos. Ambas acciones forman parte de un plan más amplio de 11 medidas y 7 decretos que apuntan a proteger el mercado interno y garantizar productos esenciales para la población.
Por ahora, la norma está en proceso de consenso con transportistas y ganaderos, pero el Ejecutivo prevé su aplicación inmediata desde el próximo mes.
