El viceministro de Defensa del Consumidor, Jorge Silva, admitió este lunes que actualmente no se está distribuyendo harina subvencionada a los panificadores, lo que imposibilita los controles de peso y precio del pan de batalla, alimento básico para miles de bolivianos.
Según explicó la autoridad, la causa principal del problema radica en el incumplimiento de pagos a los productores de harina, lo cual ha frenado la entrega del insumo a los panaderos. “¿Qué les vamos a exigir a los panificadores si no les están entregando la harina y si no están pagando a los productores lo que se les debe? Primero se tiene que pagar para que haya harina, y recién entonces el panificador puede producir el pan”, declaró Silva.
Frente a esta situación, el sector panificador ha convocado para este martes una reunión nacional, donde se analizarán medidas ante el incumplimiento de EMAPA en la entrega del insumo.
Silva expresó su preocupación por la falta de acción de las autoridades responsables del pago a los proveedores de harina, lo que genera un efecto en cadena que afecta directamente a la población. “Pediremos mediante nota que se regularicen esas deudas. Si no se soluciona ese aspecto, los panificadores seguirán adquiriendo harina del mercado a precios más altos, lo que incide en el valor final del pan”, afirmó.
El Viceministro aclaró que su despacho solo puede fiscalizar el peso y precio del pan elaborado con harina subvencionada, pero al no contar con dicho insumo, los controles pierden validez. “Mientras no se entregue la harina, poco podemos hacer. El pan elaborado con harina comercial naturalmente tiene otro costo y otras características”, explicó.