La justicia potosina dictó detención preventiva de tres meses para el alcalde de Llallagua, Adalid Jorge Aguilar, tras su presunta implicación en los violentos bloqueos de junio que provocaron la muerte de tres policías y un menor de edad.
Según el fiscal departamental, Gonzalo Aparicio Mendoza, la investigación incluye registros telefónicos y geolocalización que ubican al alcalde en puntos estratégicos donde se planearon enfrentamientos. Además, testigos protegidos señalan su participación en reuniones con líderes de los bloqueos, entre ellos Milán Mamani, sin que adoptara medidas para evitar los ataques contra civiles y fuerzas del orden.
Aguilar enfrenta cargos por asesinato, homicidio, lesiones, destrucción de bienes públicos y asociación delictuosa, y fue trasladado a Potosí por razones de seguridad.
El caso pone en evidencia la posible implicación de autoridades locales en episodios de violencia política, en un contexto de creciente tensión social y reclamos de justicia en la región.