El cónclave para elegir al sucesor del papa Francisco comenzará el miércoles 7 de mayo de 2025 en la Capilla Sixtina del Vaticano. Esta decisión fue tomada por el Colegio Cardenalicio tras el fallecimiento de Francisco el 21 de abril y la finalización de los nueve días de luto oficial (novendiales) el 4 de mayo.
Participarán 133 cardenales electores menores de 80 años, provenientes de 71 países, lo que convierte a este cónclave en el más diverso de la historia de la Iglesia Católica. El proceso de elección se llevará a cabo bajo estricto secreto y aislamiento, con votaciones diarias hasta alcanzar una mayoría de dos tercios necesaria para elegir al nuevo pontífice. Las señales tradicionales de humo blanco o negro indicarán al mundo si se ha alcanzado una decisión.
Este cónclave se desarrolla en un contexto de diversidad geográfica y desafíos internos, lo que podría influir en la duración y complejidad del proceso de elección.