Los cardenales de la Iglesia Católica se reunieron nuevamente este sábado en el Vaticano en preparación para el cónclave que elegirá al sucesor del Papa Francisco. Sin embargo, durante un breve encuentro con los medios, el cardenal francés Jean-Paul Vesco, uno de los electores, dejó entrever que el proceso de discernimiento aún requiere tiempo. "Necesitamos un poco más de tiempo para rezar juntos", confesó el purpurado, señalando que aún no se sienten listos para la votación.
Las deliberaciones previas al cónclave han girado en torno a la dirección que tomará la Iglesia tras el pontificado de Francisco. "Necesitamos discernir quién ha sido elegido por el Señor", añadió el cardenal Vesco, subrayando la importancia de la guía espiritual en este proceso crucial.
Entre los temas de debate se encuentra la continuidad del enfoque más abierto y reformista impulsado por el fallecido Papa Francisco. El cardenal argentino Vicente Bokalic Iglic expresó ante los periodistas su deseo de que el próximo líder mantenga esta línea. "Creo que el Espíritu Santo nos guiará hacia alguien que continúe con el camino que ha marcado Francisco", afirmó.
Por su parte, el cardenal italiano Marcello Semeraro puso de manifiesto la necesidad de un liderazgo colegiado. "Lo que necesitamos no es un hombre solo al mando, sino alguien que sepa escuchar y trabajar en colaboración con el colegio cardenalicio", declaró a los medios presentes.
Se espera que estas reuniones informales continúen hasta el martes. El cónclave propiamente dicho dará inicio el miércoles por la tarde en la emblemática Capilla Sixtina. Un total de 133 cardenales menores de 80 años son elegibles para participar en la votación secreta que definirá al nuevo Sumo Pontífice de la Iglesia Católica. La incertidumbre sobre el tiempo que tomará la elección persiste mientras los cardenales buscan la guía divina en este momento trascendental.
