El Gobierno, a través del Decreto Supremo 5400, establece que los vehículos con sistema a Gas Natural Vehicular (GNV) que superen los límites de compra de gasolina y diésel fijados por la ANH, deberán adquirir el excedente a precio internacional. La medida busca racionalizar el consumo de carburantes en medio de una persistente crisis de combustibles.
En un esfuerzo por controlar la demanda y el uso de carburantes subvencionados, el Gobierno boliviano ha implementado una nueva disposición que afectará a los propietarios de vehículos convertidos a Gas Natural Vehicular (GNV). El Decreto Supremo 5400, anunciado por el presidente Luis Arce como parte de las acciones para mitigar la crisis de abastecimiento de combustibles, establece que estos vehículos tendrán un límite de compra de gasolina y diésel a precio subvencionado.
Según la normativa, si un motorizado con sistema a GNV excede la cantidad de combustible líquido que fije la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) mediante una resolución administrativa, el volumen extra deberá ser adquirido al precio internacional. Esta medida busca evitar el uso indiscriminado del combustible subsidiado y desincentivar una demanda excesiva de gasolina y diésel por parte de vehículos que, en teoría, deberían usar principalmente GNV.
La ANH será la encargada de definir, a través de una resolución administrativa, la metodología y los límites de consumo para que los vehículos a GNV puedan acceder al diésel y la gasolina con precio subvencionado. Aún no se han especificado los criterios exactos para la fijación de estos límites, pero se espera que consideren factores como el tipo de vehículo y el uso habitual.