Cinco autoridades judiciales, incluido un exministro, han caído por un presunto complot para destituir a la magistrada Fanny Coaquira del Tribunal Supremo de Justicia. El caso, que ya provocó renuncias y detenciones, expone un supuesto "consorcio" de poder que operaba para sacar a la jueza, acusada de falsificar un certificado de docencia.
El escándalo se desató tras la renuncia del exministro de Justicia César Siles, a quien siguieron otros implicados, como el juez de Coroico que dictó la suspensión, ahora detenido, y la exvocal Claudia Castro, señalada como pieza clave del plan. El magistrado suplente Iván Campero, sindicado como beneficiario de la movida, fue aprehendido tras presentarse ante la Fiscalía.
El presidente del Tribunal Supremo calificó el caso como un “intento de golpe” al Órgano Judicial y prometió sanciones. La investigación sigue abierta y ha desatado una crisis de confianza en el sistema.