Un evento internacional realizado en mayo en Santa Cruz de la Sierra ha provocado una alerta sanitaria en Bolivia y Argentina, tras la confirmación de 23 casos de sarampión en Santa Cruz. Los contagios se distribuyen en municipios como Porongo, San Miguel de Velasco, Cabezas y la capital cruceña. La magnitud del encuentro, que reunió personas de más de 20 países, complica el rastreo de contactos y aumenta el riesgo de una propagación internacional.
En Bermejo, Tarija, se monitorea a 30 personas que asistieron al evento. En Argentina, al menos 14 personas de Salta también están bajo vigilancia epidemiológica. Aunque todos los contactos permanecen asintomáticos, el periodo de incubación del virus de hasta 21 días obliga a un seguimiento estricto para evitar que el brote se extienda a otras ciudades o regiones.
Las autoridades sanitarias insisten en la urgencia de la vacunación como única herramienta efectiva para frenar el avance del sarampión. La vacuna es gratuita y está disponible en todos los centros de salud del país. El llamado se dirige especialmente a niños, personas no inmunizadas y quienes estuvieron en contacto con casos sospechosos o confirmados.
A esta situación se suma un caso detectado en El Alto y un brote de hepatitis A en un colegio de Cochabamba, donde se reportaron 10 contagios. Estos hechos han llevado al Ministerio de Salud a reforzar la vigilancia epidemiológica
