El empresario, Pablo Soto se enfrentó a la justicia este jueves y por el caso Oomoto (proyecto de condominio en Tiquipaya), se determinó una multa de 50 mil bolivianos y detención domiciliaria mientras dure las investigaciones. Se lo acusa de 12 cargos de estafa.
Soto, fue arrestado el miércoles en Tarija. La familia levantó una denuncia de desaparición el pasado 13 de noviembre.
Esta siendo acusado de estafar a varias familias con la compra y venta de inmuebles en diferentes zonas de Cochabamba.