El futuro de las tres diputaciones supraestatales ganadas por el Partido Demócrata Cristiano (PDC) en Cochabamba, Potosí y Chuquisaca se convirtió en un nuevo punto de debate dentro del Tribunal Supremo Electoral (TSE), que deberá definir cómo se resolverá la ausencia de candidatos habilitados para ocupar esos escaños.
El vocal Francisco Vargas informó que la Sala Plena del TSE analizará el caso en detalle, considerando jurisprudencia y normativa electoral. “Son temas complejos, vamos a revisar la jurisprudencia de casos similares y asumir una postura institucional”, señaló en conferencia de prensa.
En la primera vuelta de las elecciones generales del 17 de agosto, el PDC logró imponerse en cinco departamentos La Paz, Oruro, Cochabamba, Potosí y Chuquisaca, lo que le permitió obtener cinco representantes supraestatales según el artículo 7 de la Ley 522. Sin embargo, solo en La Paz y Oruro contaba con postulantes habilitados. En los otros tres departamentos, el PDC no presentó candidaturas válidas; en el caso de Chuquisaca, incluso las postulaciones de Ariane Mercado Mamani y Óscar Arcienega Zamorano fueron inhabilitadas por incumplimiento de requisitos.
Este vacío abre dos posibles caminos: que el PDC designe a un diputado plurinominal para asumir esas representaciones o que, al no existir candidaturas, los escaños pasen a la segunda fuerza política en cada región, que en este caso es Libre. De prosperar esta segunda vía, los tres asientos supraestatales cambiarían de manos, modificando la correlación política en esos espacios de representación internacional.
La decisión final del TSE no solo tendrá un efecto inmediato sobre la distribución de poder, sino que también sentará un precedente en materia de representación supraestatal. Vargas advirtió que el fallo debe ser “técnico, jurídico y constitucional”, lo que refleja la delicadeza del caso: equilibrar el respeto a la voluntad popular expresada en las urnas con la validez formal de las candidaturas.