A sus 19 años, Marcelo Sthepano Timorán Paz vive el sueño que lo acompañó desde niño en Oruro: vestir la camiseta de la selección boliviana. El joven futbolista fue la gran novedad en la lista de 25 jugadores convocados por Óscar Villegas para los amistosos de octubre ante Jordania y Rusia, según anunció la Federación Boliviana de Fútbol.
Nacido en Oruro de padres peruanos, Timorán combina tres nacionalidades —boliviana, peruana y española—, pero su corazón, como él mismo dice, “siempre estuvo en Bolivia”. A los 12 años viajó junto a su padre a España en busca de oportunidades y, desde entonces, su sueño de ser futbolista profesional nunca se detuvo.
El lateral, que puede jugar también como extremo, milita actualmente en el Córdoba CF de la segunda división española. Hace pocos días firmó su primer contrato profesional hasta 2028, luego de destacarse en el juvenil y ascender al filial del club. Incluso fue convocado a entrenar con el primer equipo, lo que llamó la atención de los medios españoles como Marca, que celebró su convocatoria a la selección boliviana.
Pese a vivir en Europa, Marcelo no olvida sus raíces. Recuerda con cariño su niñez en Oruro, los platos típicos como el charque, la sopa de maní y el sillpancho, y su amor por San José, equipo al que alentó en el título de 2018. “Me gusta mucho Bolivia, tengo los mejores recuerdos de allá”, contó en una entrevista con Radio Fides.
La noticia de su convocatoria lo sorprendió durante un entrenamiento. “El director de la cantera me llamó aparte y me dio la noticia. Fue increíble”, relató. Su reacción inmediata fue llamar a su padre en Bolivia. “Tuve que esperar por el cambio de horario. Cuando se lo conté, lloró. Que mi familia esté orgullosa de mí no tiene precio”, confesó.
Marcelo Timorán representa a una nueva generación de futbolistas que llevan el nombre de Bolivia más allá de las fronteras. Su historia, marcada por esfuerzo, identidad y sueños cumplidos, es la de un joven que nunca olvidó de dónde viene y que ahora busca dejar huella con la Verde.