En un movimiento estratégico que busca fortalecer el frente anti-MAS, el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) ha anunciado su decisión de no presentar candidatos en las próximas elecciones generales de 2025. La determinación, tomada por mayoría en las instancias internas del partido, incluyendo el Comité Político Nacional y el Comando Nacional, se fundamenta en la intención de evitar la fragmentación del voto opositor y favorecer la consolidación de una candidatura única capaz de desafiar al oficialismo.
Según Javier Rojas, dirigente del MNR, esta resolución se tomó tras una consulta al Tribunal Supremo Electoral (TSE) y en base a los informes de su junta electoral. El objetivo principal, explicó, es contribuir a la unidad de las fuerzas opositoras, apoyando al candidato con mayores posibilidades de éxito frente al Movimiento Al Socialismo (MAS). Esta postura prioriza el objetivo de un cambio político por encima de la participación individual del MNR en la contienda electoral.
Como parte de este proceso de reestructuración interna y enfoque en la unidad, el presidente del MNR, Jhony Torrez, presentó su renuncia al cargo, aunque esta no fue aceptada por el directorio del partido. Respecto a la continuidad de su personería jurídica, el MNR aseguró que su participación en las elecciones subnacionales de 2021, donde obtuvieron representación en alcaldías, subalcaldías y la Gobernación de Tarija, garantiza su estatus legal ante el TSE.
Con esta decisión, el MNR se suma al debate sobre la estrategia de la oposición boliviana de cara a las elecciones de 2025, apostando por un frente unido que pueda capitalizar el descontento con el oficialismo. Su renuncia a presentar candidaturas propias abre un nuevo escenario en la configuración política del país, centrando la atención en la posible conformación de una alianza opositora sólida y competitiva.